Mis natillas de malito

Cuando yo era pequeña y me ponia enferma, no tenía ganas de comer nada, lo único que me apetecía eran natillas ( yo era muy golososa y lo sigo siendo). Así que siempre que estaba mala mi madre que me cuidaba muy bien y me hacía natillas y yo entre los mimitos, las natillas y los medicamentos me ponía buena.
Como las costumbres se heredan, cuando mi hijo Juan ( al pequeño no le gustan) se ponia malito y no quería  comer nada yo le hacía  natillas. El las empezó a llamar "natillas de malito" y con ese nombre se han quedado. Como le encantan, ya las tengo que hacer aunque no esté malo pero en mi casa las natillas se llaman "Natillas de malito".


 

Ingredientes:
130 g de azúcar
6 yemas de huevo o 3 huevos enteros.
600 g de leche
1 cucharadita de azúcar vainillada
Canela en polvo
Galletas maria (opcional)
1 cucharadita de maicena.

Preparación:
Manera convencional.
Ponemos la leche en un cazo con 100 g de azucar. Se pone al fuego hasta que empiece a cocer.
En un tazón batimos las yemas de huevo, el resto del azúcar y la maicena.
Cuando la leche hace burbujas con mucho cuidado, con un cucharón la echamos poco a poco en el tazón. Movemos muy bien.
Cuando esté bien unido lo echamos todo en el cazo, se baja el fuego y movemos con una cuchara de madera sin parar, sin que llegue a hervir.
Se forma una espuma en la superfiicie, hay que dar vueltas sin parar hasta que desaparezca esta espuma.
Ahora la vertemos en tazones individuales , ponemos una galleta encima y espolvoreamos con canela.
Dejamos enfriar y  ¡listas!

Preparación con Thermomix:
Echamos en el vaso todos los ingredientes y programamos 8 minutos, 90º velocidad 4.
Vertimos rapidamente las natillas en tazones individuales, ponemos la galleta y espolvoreamos con canela.


Comentarios: 
Yo las he preparado sólo con las yemas porque esta semana he comprado una docena de huevos en una tienda de mi barrio que venden huevos de granja, y todos venían con dos yemas. No me había pasado nunca y esta semana, los doce huevos tenian dos yemas, así que aproveché y preparé las natillas con las yemas, que están mucho más ricas.

8 comentarios:

  1. Qué historia tan tierna, las natillas caseras me encantan, pero las compradas no las puedo ni ver, de peque mi madre me las hacía para que tomara algo de leche...
    Un besito

    ResponderEliminar
  2. Que rica receta y se puede adaptar a los intolerantes al gluten y la lactosa... las pienso probar así con yemas sólo!!!
    Saluditossssssssss

    ResponderEliminar
  3. Muy simpática esa historia, eso es lo que hacemos las madres para que coman nuestros retoños y tu ya lo has comprobado, pero para comerse esas natillas solo hay que verlas con esa pinta no se resiste ni el mas "pintao" buenas de verdad. Besitosssssss.

    ResponderEliminar
  4. Mmmmmmmmmmmm pues no me importaría ponerme malita para comerme esas natillas, así seguro que me pongo buena enseguida.

    Un beso guapa

    ResponderEliminar
  5. Es que cuando uno está malito y no tiene hambre las natillas si apetece.
    Se ven buenísimas.
    Besos.

    ResponderEliminar
  6. que delicia, me encantan !!!

    Besos

    LA COCINA DE LAS PINUINAS

    ResponderEliminar
  7. Que curioso, mi madre hacía flanes!!! aprovecha esto la curiosidad de los huevos por qué los 12!!! es mucha casualidad. Una natillas excelentes!!!Bss

    ResponderEliminar
  8. He tenido que entrar aquí para verlo, pq en fb no se ve bien.
    ¡Yo también me pongo malita para que me invites a natillas, Elena!

    ResponderEliminar